viernes, 8 de diciembre de 2017

Cuatro ecuatorianos eliminan los pinchazos

Los jóvenes inventores de la aplicación subcutánea de medicamentos están entre los cinco finalistas del concurso 'Una idea para cambiar al mundo', de la cadena internacional History Channel. Los estudiantes veinteañeros conocerán el resultado final el 6 de diciembre en México. Este certamen lo ganaron el año pasado los alumnos de la ESPE con su invento HandEyes. La película de ciencia ficción Elysium inspiró al estudiante ecuatoriano Fidel Mena para desarrollar un prototipo que evita las inyecciones a los pacientes que necesitan la aplicación diaria de medicinas.

Mena, de 21 años, pensó en las personas diabéticas que requieren administrarse insulina todos los días.

Esteban Viteri, de 23; Bryan Plazarte, de 23, y Fernando Arias, de 21, compañeros de la Universidad Tecnológica Equinoccial (UTE) de Quito, se sumaron al proyecto.

Plazarte explicó que para la mayoría de pacientes es doloroso recibir un pinchazo "y este invento alivia esa molestia de una manera no invasiva". El suministro de medicinas, en el filme, ocurre a través de un sistema inalámbrico; mientras que en el proyecto nacional se usa un ultrasonido.

La idea surgió en febrero de este año. Mena propuso a sus tres amigos cercanos plasmar el invento en prototipo. Así comenzó a investigar y diseñar el producto.

Un mes después nació el primer 'Biobyte' para la competencia de robótica 'Latitud 0' (ocuparon segundo lugar).

Con el invento concursaron en la Escuela Politécnica del Litoral (Espol) y llegaron a la tercera posición.

"Ese historial nos permitió pensar en algo más grande y decidimos ver los requisitos que exigían para participar en 'Una idea para cambiar al mundo', de History Channel".





El último día de las inscripciones lograron completar todos los requerimientos y ser parte de los 17.000 proyectos presentados a nivel de toda América Latina.

Dos semanas después recibieron la notificación de estar entre los 10 semifinalistas de la presente edición.

"No lo podíamos creer. Al principio pensamos que era una broma, pero luego nos mostraron la pantalla de la web del concurso con nuestro invento".

A partir de ese momento comenzó la campaña en su institución y las redes sociales para sumar los votos con los que se inscribieron entre los cinco finalistas. Sumaron 36.000 respaldos.

Hoy aguardan el veredicto del jurado el 6 de diciembre en México; pero por el momento ya tienen asegurado $ 10.000, que es el premio para el cuarto y quinto lugar.

"Nuestro anhelo es llegar primeros y repetir el triunfo ecuatoriano en este certamen", acotó Brian.

El año pasado, cuatro estudiantes de la Universidad de las Fuerzas Armadas (ESPE) con su invento HandEyes conquistaron el primer lugar.

La creación

Para la elaboración del prototipo utilizaron materiales nacionales. La carcasa fue impresa en 3D con una pantalla touch en la que interactúa el paciente.

A través de un transductor (dispositivo que convierte la energía entrante) se emite el ultrasonido con vibraciones mecánicas que permiten la expansión de los poros y el ingreso del medicamento, sin ningún tipo de efecto secundario, y de manera natural.

Para ello, se utiliza una membrana (gasa) impresa de la medicina que va a administrarse de manera subcutánea.

"Los medicamentos aptos para ingresar por esta vía son los liposolubles como la insulina porque la pila actúa a manera de impermeable y todo lo que es líquido lo bota, no así con aceites y grasas".

El dispositivo funciona con energía eléctrica. Por medio de la pantalla digital se escoge el tipo de medicina y automáticamente se visualiza el tiempo que durará la aplicación médica.

"La idea es que las personas tengan el 'Biobyte' en casa para suministrarse las medicinas liposolubles, pero aún faltan pasos que cumplir".

En dos años esperan completar, con el apoyo de la UTE, todas las investigaciones y la fase experimental del invento para que este pueda comercializarse en el mercado local e internacional. (I) 

Empresas apoyarán a tres proyectos de colegiales 


→Alumnos del colegio Pérez Pallares fueron los ganadores del certamen con el proyecto de 'Electrocultivos' para combatir la escasez de alimentos. Foto: Álvaro Pérez / et

→550 estudiantes de 25 colegios de Quito fueron parte de las olimpiadas de iniciativas comerciales 'Emprende y actúa', realizadas por la Universidad San Francisco de Quito (USFQ). 

En el campus de ese centro de educación superior se expusieron 25 ideas que solucionan problemáticas de energía sintética, apoyo a la comunidad y medioambiente. Al final de la feria, tres proyectos resultaron ganadores.

El primer puesto fue para la Unidad Educativa Particular Pérez Pallares, ubicada en el norte de Quito. Sus mentores (Saúl Parra, Kevin Orquera y Luis Fajardo) desarrollaron un proyecto de electrocultivos. La iniciativa combate la escasez de alimentos en el mundo.

"El proyecto se centró en la agricultura vertical, urbana y cosechadoras (laboratorios de análisis sobre ruedas", indicó Parra tras recibir un trofeo y una medalla.

El evento, creado por Fundación Crisfe, Activaos y la Alianza para el Emprendimiento e Innovación (AEI), impulsa las competencias y habilidades de los estudiantes en temas de innovación, apoyados en su entorno y en la tecnología.

Antes de la feria, representantes de estas organizaciones recorrieron los principales colegios de la capital de la República para capacitar a los estudiantes e invitarlos a generar proyectos y que los hagan realidad.

Como parte del apoyo, los participantes recibieron una dotación de herramientas necesarias para plasmar sus ideas.

Los docentes también destinaron parte de sus horas de clase para que los chicos trabajen en el plan.

El segundo lugar fue para el colegio Jim Irwin. El grupo de ocho estudiantes, de segundo año de bachillerato, se enfocaron en trabajar en un dispositivo (gadget) fijo al suelo que se encarga de transformar el movimiento de las personas en energía eléctrica a través de sensores de presión.

Emili Jaramillo, una de las alumnas que participó, explicó que el objetivo es implementar ese dispositivo en lugares donde se registre mayor cantidad de movimiento (como un parque de juegos infantiles).

De esa forma, y al utilizar sensores con propiedades piezoeléctricas, se almacena la energía para luego convertirla en luz.

Según los estudiantes, este proyecto tendría la capacidad de reducir los gastos por alumbrado público en los parques del país. Lo mismo pasaría en los patios de los centros educativos e incluso se podría implementar en las casas. "Esto representaría un ahorro de energía para todos los ciudadanos", indicó la adolescente de 16 años.

El tercer lugar lo obtuvo el Colegio Internacional Sek. Con el proyecto Sadac, el cual reutiliza la ropa y genera de ella una nueva marca. Los chicos trabajaron en ese producto porque se dieron cuenta de que en muchos hogares botan grandes cantidades de prendas de vestir que ya no les queda o que están deterioradas.

"Buscamos darle una segunda vida útil a la ropa. Además, pusimos a prueba nuestra creatividad con la creación de nuevos diseños hechos con prendas desechadas".

Los tres proyectos obtuvieron un reconocimiento económico y tendrán la ayuda de la empresa privada para que se concreten como emprendimiento. (I) 

Concurso de robótica se desarrolló en Guayaquil 


→El Palacio de Cristal de Guayaquil ayer fue sede del concurso para menores de edad denominado World Robot Olympiad (WRO).

El objetivo de la actividad fue que los niños y adolescentes tengan acceso a una educación en la que la ciencia, tecnología, ingeniería, arte y matemáticas sean parte del día a día en un ambiente lúdico.

El WRO Ecuador 2017 comenzó ayer en la mañana y concluyó en la tarde. Los grupos fueron divididos en regular y fútbol.

Julián Román, de 16 años, y Carlos Carrera, de 11, expusieron ayer su creación en uno de los puestos distribuidos en el salón. Ellos inventaron el Box Machine. Este es un dron cuya función es recolectar la basura que los vehículos grandes no pueden mientras limpian la ciudad.

El pequeño prototipo, expresa Julián, va debajo de los carros que se llevan los desperdicios de las viviendas.

Ellos, de la institución Ecuation (Guayaquil), buscaron una solución ambiental a un problema cotidiano de la ciudad. "El robot (elaborado con piezas de lego) fue construido en pocas horas, pero la idea la desarrollamos hace algunos días", comentó Carrera.

Él observó que los automotores de limpieza normalmente no logran eliminar todos los residuos de las calles, de allí empezaron a plasmar el dispositivo parecido a un pequeño helicóptero. 

Luca Van Goor, estudiante del colegio particular Sek y tres compañeros más de su institución educativa (de Quito), elaboraron el wedo 2.0, el cual sigue algunas órdenes y tareas encomendadas por los mentores.

Luca participó en un concurso que consistía en movilizar un pequeño artefacto que llevaba otras piezas similares, de plástico, a los sitios que le pedía.

Este juego se desarrolló en una especie de cancha de fútbol, a escala, donde estaban las piezas que se debían remover.

Luca, con una tableta digital en la mano, programaba los movimientos requeridos por los jueces. Ellos evaluaron las habilidades de los androides.

Mientras se efectuaba la actividad, los estudiantes formaron círculos y empezaron a armar las piezas. Los adolescentes comenzaron a llegar en la tarde (al cierre de esta edición).

Los organizadores anunciaron que los equipos ganadores se coronarán como campeones nacionales inscritos internacionalmente ante el WRO y tres concursantes representarán al país en el evento que se llevará a cabo en Costa Rica.

Desde su inicio en 2004, esta competencia ha visitado países como China, Tailandia, Singapur, Malasia, Catar, Rusia, India, Filipinas, Emiratos Árabes Unidos, Taiwán y Corea del Sur.

En la final del 2016 contó con 55 países y 22.000 equipos.

Los organizadores también destacaron que varias empresas apoyaron el proyecto. (I)